COLABORACIONES

Crisis Civilizatoria y Revolución Ciudadana

Isael Petronio Cantú Nájera
Hay una grave y profunda crisis civilizatoria que pocos ven y que la mayoría niega; sin embargo en los hechos, incluso los que la niegan la promueven y con sus actos demuestran el desprecio por lo humano, por lo auténticamente humano y su avidez por el capital y su abyecta ganancia.

Si estuviéramos en la época de las cavernas, no nos espantaría comernos al prójimo, era relativamente normal el canibalismo e incluso desayunar al vecino, no con él, era seguramente normal.

Sin peso ni medida, a la falta de un derecho natural que se impusiera en la lógica de una ética de la equidad y sin concepto de la justicia, también lo común era que el más fuerte, a pesar de lo estúpido que fuera se impusiera sobre el más débil y clarividente del grupo… Venimos de épocas oscuras y podemos imaginar mundos como los de Tolkien, con su Señor de los Anillos y a Saurón comandado a sus hordas de licántropos y Orcos, pero no vemos por ningún lado, a un Frodo que épicamente, desde sus miedos más profundos enfrente la terrible guerra con la guerra para acabar con el mal.

Con palabras de Octavio paz, podemos decir que nuestra actual civilización se la está llevando la Chingada; si, en esa complejidad del significado del término y sobretodo en las consecuencias que se tienen en el inconsciente colectivo de ser todos hijos de la chingada.

Decía que algunos no ven la crisis civilizatoria pero con sus actos la promueven; sino, que es lo que hace el cura pederasta que viola niños y niñas en nombre de dios; que hace el policía que roba y asesina al ciudadano que estaba obligado a cuidar de sus cosas y de su vida; que hace el político que roba el erario público y abandona la ciudad a una lucha de clases sin cuartel; que hace el maestro que no enseña y vende las calificaciones al mejor postor; que es lo que hace la volkswagen cuando lanza al mercado coches chafas y contaminantes; que institucionalidad representa el juez venal que prostituye sus sentencias o más político: ¿que clase de democracia se monta con el voto comprado al ciudadano enajenado e ignorante? Nada nuevo, y ya hace varios miles de años, Aristóteles, clasificaba y argumentaba la barbarie de los gobiernos de los más malos, de los más corruptos y le ponía nombre: Demagogia y Oligarquía, pero más acertadamente se le puede llamar: cacocracia, el gobierno de los peores, de los más corruptos, de los ladrones y en esa larga lista de actos que revelan la crisis civilizatoria… ¿que hace sino el filósofo ensalzando en tiempos de postverdad a gobiernos emanados del sistemático fraude electoral o del voto comprado o del voto influido por el narco?

Pero abramos un poco la puerta para que entre aire fresco, ya que el olor de las fosas clandestinas nos atosiga y pareciera que no podemos respirar: en la esencia misma del hombre está el arma para construir una nueva civilización que desarme, como desarmar un mecano o rompecabezas, la esencia del modelo de producción capitalista sobre todo en su fase imperialista, globalizada y ultraliberal cuyo objeto es la pura ganancia del capital por otro donde la centralidad sea el humano y su conexión integral con la naturaleza en procesos sustentables y sostenibles ecológicamente hablando: ¡Vaya, no tenemos porque estar chingando a la naturaleza, sobre todo, cuando el calentamiento global nos dice que la tierra se está encabronando!

Decía que abramos la puerta y miremos las oportunidades que tenemos para el cambio civilizatorio; y nada más basta con tocarse la bolsa del pantalón, la muñeca o mirar en el mágico bolso de las mujeres para encontrar una poderosa herramienta, que hace tres décadas nadie pensaba y pocos tenían: la computadora personal de bolsillo, un teléfono inteligente… pero sin duda, tener uno de esos no nos hace inteligentes de la noche a la mañana sobretodo cuando se padece selfitis, feisbuquitis o tuiteritis ¡Ojalá que la vieja Real Academia no incorpore estos horribles anglicismos!

Todas estas tecnologías de la información y de la comunicación, realmente, han empequeñecido al mundo… hoy podemos ver en tiempo real como una bomba destripa a cien niños en Aleppo o como la bellísima quinceañera Alina Zagitova gana la medalla de oro en patinaje artístico en Pyeongchang o como el imbécil de Donald Trump decreta que se hará el muro y se lo cobrará a los mexicanos o podremos ver como la Forma del Agua se lleva algunos Oscares… ¡todo en la palma de la mano!

Las diversas revoluciones tecnológicas hablan del ingenio humano y tienen la potencialidad de construir una nueva civilización, pero sin duda, están encorcetadas aún por las duras leyes del mercado capitalista y del consumismo creado a su modo, por ejemplo el libro de caras, es decir Facebook tiene 2000 millones de usuarios y lo utilizan diariamente 860 millones de personas y Wikipedia solo recibe 35.7 millones de visitas al día… y eso que no es la enciclopedia especializada de matemáticas; es decir, la gente está atrapada en la lógica mercantil, la cosificación de las cosas y hasta de las relaciones personales de tipo patológico. 

Pero aún así, las TIC´s, están revolucionando la forma en que se adquieren los conocimientos y al tener menos control que los medios informativos históricos, libran de mejor manera la censura y pueden dar a conocer una visión alterna, más real, menos oficial.

En el campo de la producción industrial la robótica en poco tiempo desplazará la fuerza bruta de trabajo y tal vez solo requerirá el trabajo especializado de diseñar y construir la programación que haga funcionar correctamente al metálico obrero. 

En la agroindustria, tomando en cuenta la bioética, la clonación de semillas mejoradas y de animales, están en los límites de la autosuficiencia, salvo que el mercado prefiere tirar a la basura toneladas de alimentos que repartirlos equitativamente entre la población… y así, podremos darnos cuenta que las herramientas para un cambio civilizatorio que evite la destrucción de la humanidad ya las tenemos pero que están dispersas y por ello no funcionan y no funcionan porque la “ciudadanía” no logró consolidarse como animal político y se quedó como simple animal económico, como clientela de un mal producto: del presidencialismo autoritario, populista y corrupto.

Si buscan en Google fraude electoral encontrarán 865,000 resultados, si buscan Cambio Civilizatorio, 271,000 y si buscan corrupción, lo encontrarán 17,900,000 veces… y si buscan de manera conjunta corrupción y fraude electoral encontrarán 880,000 entradas en menos de un segundo, quiero decir con esto, que el tema está volviéndose relevante y que las redes sociales paulatinamente estarán escribiendo, debatiendo e interesándose por la actuación de los gobiernos y calificándolos bien o mal.

Dentro de las múltiples herramientas de las TIC´s, una de ellas cimenta las nuevas formas de gobierno, hablo del Opengov o gobierno abierto, de la acción real y concreta de informar al gobernado las razones y los porqués de las políticas públicas que un gobierno impulsa, sin esperar a que el ciudadano pregunte por ellas, como correlato está el derecho a la información que ahora es derecho positivo en muchos países, por lo menos para saber que el presidente gana 3,115, 531 pesos de salario neto al año y un obrero soldador gana solamente al año 124 860 pesos; el presi… se embolsa 259,627.58 pesos al mes y el soldador, solamente 10,405… ni hablemos de los que viven en la pobreza que son más de 50 millones de mexicanos.

Finalmente, para los cínicos, el voto es el voto y una vez contado los gobiernos se legitiman y se legalizan, si… así lo vivimos durante el sexenio de Duarte, con la diferencia de que ahora él está en la cárcel y nosotros relativamente libres y digo relativamente porque podemos estar presos en la ignorancia, que no necesariamente es la falta de títulos académicos, sino la ignorancia de la cosa pública, de la política, de estar consciente de que por encima de mis intereses egoístas están los intereses de la sociedad a la que pertenezco.

No contribuye a nada el voto clientelar y cautivo, puede construir gobiernos, ahí está Peña Nieto, ahí está Trump o Putin, lo que queremos es un voto reflexivo, crítico, informado, que revolucione la democracia adocenada que tenemos y construya una gobernanza democrática donde el poder gravite más hacia la ciudadanía participativa; la que exige que se rindan cuentas, la que puede premiar con la reelección pero también puede castigar con la revocación del mandato. Una ciudadanía que vigile a los gobernantes y no les firme un cheque en blanco… yo espero, al final de este conversatorio, que se hagan un “selfie” y pongan soy ciudadano del mundo y lucho por un profundo cambio civilizatorio, porque la gota de agua en su insistencia y constancia, rompe la roca más dura, y ustedes son una cascada de agua fresca… gracias por venir, oír y conversar

Isael Petronio Cantú Nájera

Hay una grave y profunda crisis civilizatoria que pocos ven y que la mayoría niega; sin embargo en los hechos, incluso los que la niegan la promueven y con sus actos demuestran el desprecio por lo humano, por lo auténticamente humano y su avidez por el capital y su abyecta ganancia.

Si estuviéramos en la época de las cavernas, no nos espantaría comernos al prójimo, era relativamente normal el canibalismo e incluso desayunar al vecino, no con él, era seguramente normal.

Sin peso ni medida, a la falta de un derecho natural que se impusiera en la lógica de una ética de la equidad y sin concepto de la justicia, también lo común era que el más fuerte, a pesar de lo estúpido que fuera se impusiera sobre el más débil y clarividente del grupo… Venimos de épocas oscuras y podemos imaginar mundos como los de Tolkien, con su Señor de los Anillos y a Saurón comandado a sus hordas de licántropos y Orcos, pero no vemos por ningún lado, a un Frodo que épicamente, desde sus miedos más profundos enfrente la terrible guerra con la guerra para acabar con el mal.

Con palabras de Octavio paz, podemos decir que nuestra actual civilización se la está llevando la Chingada; si, en esa complejidad del significado del término y sobretodo en las consecuencias que se tienen en el inconsciente colectivo de ser todos hijos de la chingada.

Decía que algunos no ven la crisis civilizatoria pero con sus actos la promueven; sino, que es lo que hace el cura pederasta que viola niños y niñas en nombre de dios; que hace el policía que roba y asesina al ciudadano que estaba obligado a cuidar de sus cosas y de su vida; que hace el político que roba el erario público y abandona la ciudad a una lucha de clases sin cuartel; que hace el maestro que no enseña y vende las calificaciones al mejor postor; que es lo que hace la volkswagen cuando lanza al mercado coches chafas y contaminantes; que institucionalidad representa el juez venal que prostituye sus sentencias o más político: ¿que clase de democracia se monta con el voto comprado al ciudadano enajenado e ignorante? Nada nuevo, y ya hace varios miles de años, Aristóteles, clasificaba y argumentaba la barbarie de los gobiernos de los más malos, de los más corruptos y le ponía nombre: Demagogia y Oligarquía, pero más acertadamente se le puede llamar: cacocracia, el gobierno de los peores, de los más corruptos, de los ladrones y en esa larga lista de actos que revelan la crisis civilizatoria… ¿que hace sino el filósofo ensalzando en tiempos de postverdad a gobiernos emanados del sistemático fraude electoral o del voto comprado o del voto influido por el narco?

Pero abramos un poco la puerta para que entre aire fresco, ya que el olor de las fosas clandestinas nos atosiga y pareciera que no podemos respirar: en la esencia misma del hombre está el arma para construir una nueva civilización que desarme, como desarmar un mecano o rompecabezas, la esencia del modelo de producción capitalista sobre todo en su fase imperialista, globalizada y ultraliberal cuyo objeto es la pura ganancia del capital por otro donde la centralidad sea el humano y su conexión integral con la naturaleza en procesos sustentables y sostenibles ecológicamente hablando: ¡Vaya, no tenemos porque estar chingando a la naturaleza, sobre todo, cuando el calentamiento global nos dice que la tierra se está encabronando!

Decía que abramos la puerta y miremos las oportunidades que tenemos para el cambio civilizatorio; y nada más basta con tocarse la bolsa del pantalón, la muñeca o mirar en el mágico bolso de las mujeres para encontrar una poderosa herramienta, que hace tres décadas nadie pensaba y pocos tenían: la computadora personal de bolsillo, un teléfono inteligente… pero sin duda, tener uno de esos no nos hace inteligentes de la noche a la mañana sobretodo cuando se padece selfitis, feisbuquitis o tuiteritis ¡Ojalá que la vieja Real Academia no incorpore estos horribles anglicismos!

Todas estas tecnologías de la información y de la comunicación, realmente, han empequeñecido al mundo… hoy podemos ver en tiempo real como una bomba destripa a cien niños en Aleppo o como la bellísima quinceañera Alina Zagitova gana la medalla de oro en patinaje artístico en Pyeongchang o como el imbécil de Donald Trump decreta que se hará el muro y se lo cobrará a los mexicanos o podremos ver como la Forma del Agua se lleva algunos Oscares… ¡todo en la palma de la mano!

Las diversas revoluciones tecnológicas hablan del ingenio humano y tienen la potencialidad de construir una nueva civilización, pero sin duda, están encorcetadas aún por las duras leyes del mercado capitalista y del consumismo creado a su modo, por ejemplo el libro de caras, es decir Facebook tiene 2000 millones de usuarios y lo utilizan diariamente 860 millones de personas y Wikipedia solo recibe 35.7 millones de visitas al día… y eso que no es la enciclopedia especializada de matemáticas; es decir, la gente está atrapada en la lógica mercantil, la cosificación de las cosas y hasta de las relaciones personales de tipo patológico. 

Pero aún así, las TIC´s, están revolucionando la forma en que se adquieren los conocimientos y al tener menos control que los medios informativos históricos, libran de mejor manera la censura y pueden dar a conocer una visión alterna, más real, menos oficial.

En el campo de la producción industrial la robótica en poco tiempo desplazará la fuerza bruta de trabajo y tal vez solo requerirá el trabajo especializado de diseñar y construir la programación que haga funcionar correctamente al metálico obrero. 

En la agroindustria, tomando en cuenta la bioética, la clonación de semillas mejoradas y de animales, están en los límites de la autosuficiencia, salvo que el mercado prefiere tirar a la basura toneladas de alimentos que repartirlos equitativamente entre la población… y así, podremos darnos cuenta que las herramientas para un cambio civilizatorio que evite la destrucción de la humanidad ya las tenemos pero que están dispersas y por ello no funcionan y no funcionan porque la “ciudadanía” no logró consolidarse como animal político y se quedó como simple animal económico, como clientela de un mal producto: del presidencialismo autoritario, populista y corrupto.

Si buscan en Google fraude electoral encontrarán 865,000 resultados, si buscan Cambio Civilizatorio, 271,000 y si buscan corrupción, lo encontrarán 17,900,000 veces… y si buscan de manera conjunta corrupción y fraude electoral encontrarán 880,000 entradas en menos de un segundo, quiero decir con esto, que el tema está volviéndose relevante y que las redes sociales paulatinamente estarán escribiendo, debatiendo e interesándose por la actuación de los gobiernos y calificándolos bien o mal.

Dentro de las múltiples herramientas de las TIC´s, una de ellas cimenta las nuevas formas de gobierno, hablo del Opengov o gobierno abierto, de la acción real y concreta de informar al gobernado las razones y los porqués de las políticas públicas que un gobierno impulsa, sin esperar a que el ciudadano pregunte por ellas, como correlato está el derecho a la información que ahora es derecho positivo en muchos países, por lo menos para saber que el presidente gana 3,115, 531 pesos de salario neto al año y un obrero soldador gana solamente al año 124 860 pesos; el presi… se embolsa 259,627.58 pesos al mes y el soldador, solamente 10,405… ni hablemos de los que viven en la pobreza que son más de 50 millones de mexicanos.

Finalmente, para los cínicos, el voto es el voto y una vez contado los gobiernos se legitiman y se legalizan, si… así lo vivimos durante el sexenio de Duarte, con la diferencia de que ahora él está en la cárcel y nosotros relativamente libres y digo relativamente porque podemos estar presos en la ignorancia, que no necesariamente es la falta de títulos académicos, sino la ignorancia de la cosa pública, de la política, de estar consciente de que por encima de mis intereses egoístas están los intereses de la sociedad a la que pertenezco.

No contribuye a nada el voto clientelar y cautivo, puede construir gobiernos, ahí está Peña Nieto, ahí está Trump o Putin, lo que queremos es un voto reflexivo, crítico, informado, que revolucione la democracia adocenada que tenemos y construya una gobernanza democrática donde el poder gravite más hacia la ciudadanía participativa; la que exige que se rindan cuentas, la que puede premiar con la reelección pero también puede castigar con la revocación del mandato. Una ciudadanía que vigile a los gobernantes y no les firme un cheque en blanco… yo espero, al final de este conversatorio, que se hagan un “selfie” y pongan soy ciudadano del mundo y lucho por un profundo cambio civilizatorio, porque la gota de agua en su insistencia y constancia, rompe la roca más dura, y ustedes son una cascada de agua fresca… gracias por venir, oír y conversar

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