CULTURAL

Reconocen solidaridad de México con Chile durante el golpe de Estado de 1973 en ese país

Es esencial levantar la voz cuando haya señales de autoritarismo, considera Beatriz Paredes.

A 50 años del golpe de Estado en Chile, legisladores y funcionarios coincidieron en que México destacó entre la comunidad internacional por el apoyo y solidaridad que brindó a miles de exiliados de esa nación, que se refugiaron en nuestro país durante 17 años.

Durante el conversatorio “Experiencias del exilio: memoria y solidaridad de México”, subrayaron que el cálido recibimiento y el hecho de que nuestro país suspendiera relaciones con Chile hasta el restablecimiento de la democracia es un orgullo para el Servicio Exterior Mexicano y motivo para que muchos chilenos consideren a México como una “segunda patria”.

Ante lamentables hechos como los de 1973, la senadora Beatriz Paredes subrayó que es esencial levantar la voz cuando haya señales de autoritarismo y fundamental evitar que “se aflojen la alertas” cuando se pongan en peligro los procesos de revolución, democracia y respeto a los derechos humanos.

“El mutismo en materia de derechos humanos nos lo cobra muy caro la historia”, sostuvo la presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores América Latina y el Caribe, quien celebró la determinación de Gonzalo Martínez Corbalá, embajador de México en Chile durante el golpe militar, pues dio asilo a más de 800 chilenos en la embajada, entre ellos, a Pablo Neruda.

Por su parte, el presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores, Héctor Vasconcelos, subrayó que Salvador Allende, fallecido en el golpe de Estado del 11 de septiembre de 1973, es una figura toral en la historia de Latinoamérica, pues intentó transformar la sociedad conservadora chilena de la época en una moderna, igualitaria y libre de pobreza.

Sin embargo, señaló, su lucha le costó la vida en el asalto al Palacio de la Moneda, acontecimiento que conmocionó a todas las conciencias progresistas del continente y fue otro ejemplo de la intromisión de Estados Unidos para imponer regímenes autoritarios en varias latitudes del planeta.

Como invitados de la delegación chilena, asistieron la senadora Isabel Allende Bussi, hija de Salvador Allende; y el también legislador José Miguel Insulza, quien se refugió en México días antes de los fatídicos acontecimientos del 11 de septiembre.